miércoles, 30 de noviembre de 2016

martes, 29 de noviembre de 2016

¿Qué nos hace realmente felices en la vida?

noviembre 29, 2016 0

Algunas lecciones de un profesor de Harvard tras años buscando las respuestas

Robert WaldingerImage copyrightROBERT WALDINGER
Image captionRobert Waldinger es el cuarto director del estudio sobre desarrollo adulto de Harvard que comenzó hace más de siete décadas, "el estudio más prolongado sobre la felicidad".
¿Qué nos hace realmente felices en la vida?
Durante 76 años una investigación de la Universidad de Harvard (Estados Unidos) ha buscado la respuesta.
El Estudio sobre Desarrollo Adulto* comenzó en 1938 con 700 hombres jóvenes, algunos de la prestigiosa universidad, otros de barrios pobres de Boston.
Y acompañó a lo largo de su vida a esos individuos, monitoreando su estado mental, físico y emocional. La investigación continúa ahora con más de mil hombres y mujeres, hijos de los participantes originales.
El actual director del estudio, el cuarto desde su inicio, es el psiquiatra estadounidense Robert Waldinger, quien también es maestro zen.
Lo importante para mantenernos felices y saludables a lo largo de la vida es la calidad de nuestras relaciones
Robert Waldinger
La charla TED que Waldinger dio sobre el proyecto, "Qué es una buena vida: lecciones del estudio más prolongado sobre la felicidad", se volvió sensación en internet y ya fue descargada más de 11 millones de veces.
"Hay muchas conclusiones de este estudio", dijo Waldinger a BBC Mundo. "Pero la fundamental, que vemos una y otra vez, es que lo importante para mantenernos felices y saludables a lo largo de la vida, es la calidad de nuestras relaciones".

Conectados

"Lo que encontramos es que en el caso de las personas más satisfechas en sus relaciones, más conectadas a otros, su cuerpo y su cerebro se mantienen saludables por más tiempo", señaló el académico estadounidense.
Dos mujeres jóvenes abrazadasImage copyrightTHINKSTOCK
Image caption"Una relación de buena calidad significa una relación en la que te sientes seguro, en la que puedes ser tú mismo".
"Una relación de buena calidad significa una relación en la que te sientes seguro, en la que puedes ser tú mismo. Claro que ninguna relación es ideal, pero esas son cualidades que hacen que la gente florezca".
En el otro extremo, está la experiencia de soledad, un sentimiento subjetivo de estar menos conectados de lo que nos gustaría.
"¿Estoy haciendo cosas que tienen un significado para mí? ¿Estoy haciendo cosas que me hacen sentir que importo en el mundo? Éstas son las preguntas que nos planteamos cuando hablamos de felicidad", señaló Waldinger.
"No hablamos de estar contentos en cada momento, porque eso es imposible y todos tenemos días, semanas o años difíciles".
En cuanto a la fama o el dinero, "no es que sean malos, hay gente famosa feliz y gente famosa infeliz".
Lo mismo con el dinero. Pero el estudio muestra de acuerdo al académico que más allá de un nivel en que nuestras necesidades están cubiertas, un aumento en el ingreso no necesariamente nos hará felices.
"No estamos diciendo que no puedas proponerte ganar más dinero o estar orgulloso de tu trabajo y que otros lo noten. Pero es importante no esperar que tu felicidad dependa de esas cosas".

Registros médicos

Los participantes del estudio respondieron a lo largo de décadas cuestionarios sobre su familia, su trabajo, su vida en la comunidad.
Dos amigas sonriendoImage copyrightTHINKSTOCK
Image caption"En el caso de las personas más satisfechas en sus relaciones, más conectadas a otros, su cuerpo y su cerebro se mantienen saludables por más tiempo", señaló Waldinger.
"También tuvimos acceso a sus registros médicos, por lo que evaluamos su salud no sólo según lo que ellos decían sino lo que sus doctores e historial medico decían", explicó.
"Cuando comencé a trabajar en el estudio en 2003 grabamos videos de los participantes hablando con sus esposas sobre sus preocupaciones más profundas. Y enviamos preguntas a los hijos sobre la relación con sus padres".
Los participantes también se realizaron exámenes de sangre para determinar múltiples indicadores de salud, e incluso análisis de ADN.
"Algunos nos permitieron escanear su cerebro, y en algunos casos donaron su cerebro para que pudiéramos estudiarlo en conexión con todos los otros datos que ya teníamos sobre su vida".

"En mi propia vida"

Cuando la charla de Waldinger se volvió viral, el académico optó por un retiro en silencio durante tres semanas.
"La tradición Zen sostiene que la contemplación nos ayuda a mantenernos con los pies en la tierra y centrados en lo que es más importante en la vida", escribió en ese entonces.
Dos personas de manos dadasImage copyrightTHINKSTOCK
Image caption"La tendencia social es aislarnos, quedarnos en casa para la television, o estar en redes sociales, pero en mi propia vida me he dado cuenta que cuando estoy más feliz es cuando no estoy haciendo eso".
Para dar respuesta al enorme interés del público, el académico creó un blog en internet sobre el estudio, robertwaldinger.com
La investigación ha tenido un impacto profundo en la vida de Waldinger.
"Me ha hecho poner más atención en mis propias relaciones, no sólo en casa sino en el trabajo y en la comunidad", señaló a BBC Mundo.
"Me di cuenta que mis relaciones me dan energía cuando invierto en ellas, cuando les dedico tiempo. Se vuelven más vivas y no agotadoras", agregó.
"La tendencia social es aislarnos, quedarnos en casa para la televisión o estar en redes sociales, pero en mi propia vida me he dado cuenta que cuando estoy más feliz es cuando no estoy haciendo eso".

Ofrecer nuestra presencia

Invertir en una relación para Waldinger significa estar presente.
Dos amigos tomando un caféImage copyrightTHINKSTOCK
Image caption"Les diría a los lectores que traten de ver si pueden tender un lazo hacia otras personas, especialmente a aquellas con quienes tienen algún conflicto".
"Esto está en mi vida como practicante Zen. Lo que noto es que cuando ofrecemos nuestra atención indivisa y completa nos sentimos más conectados unos a otros, y esto también sucede en el trabajo", agregó.
"No se trata de pasar más tiempo en el trabajo, sino de poner más atención en el otro, de conectar más con los otros, en lugar de dar por descontado que el otro siempre está allí".

Conflictos

Waldinger reconoce que puede ser difícil no perder de vista lo que realmente importa.
En parte esto se debe a que recibimos mensajes de nuestra cultura todo el tiempo, con anuncios de publicidad que nos dicen cada día que si compramos algo seremos más felices o nos amarán más.
"Y en los últimos 30 o 40 años se ha glorificado la riqueza, hay billonarios que son héroes sólo porque son billonarios. Esta medida parece más fácil, porque las relaciones son difíciles, cambian, son complicadas".
Los conflictos realmente minan nuestra energía. Y quiebran nuestra salud
Robert Waldinger
¿Cuál es el mensaje final de Waldinger a los lectores de BBC Mundo?
"Les diría que traten de ver si pueden tender un lazo hacia otras personas. Y es particularmente importante hacerlo hacia aquellas con quienes tienen algún conflicto".
El estudio ha dejado en claro algo que vale la pena recordar, según el psiquiatra estadounidense.
"Los conflictos realmente minan nuestra energíaY quiebran nuestra salud".
Read more...

martes, 22 de noviembre de 2016

noviembre 22, 2016 0
Semana 9:  Implementacion de Desarrollo Organizacional a una empresa

Read more...

viernes, 11 de noviembre de 2016

Qué es la cuarta revolución industrial

noviembre 11, 2016 0

Qué es la cuarta revolución industrial (y por qué debería preocuparnos) Fuente




Los sistemas ciberfísicos, capaces de comunicarse entre sí y con los humanos, están en el centro de la revolución en ciernes.

A finales del siglo XVII fue la máquina de vapor. Esta vez, serán los robots integrados en sistemas ciberfísicos los responsables de una transformación radical.
Los economistas le han puesto nombre: la cuarta revolución industrial.
Marcada por la convergencia de tecnologías digitales, físicas y biológicas, anticipan que cambiará el mundo tal como lo conocemos.
¿Suena muy radical? Es que, de cumplirse los vaticinios, lo será. Y está ocurriendo, dicen, a gran escala y a toda velocidad.
"Estamos al borde de una revolución tecnológica que modificará fundamentalmente la forma en que vivimos, trabajamos y nos relacionamos. En su escala, alcance y complejidad, la transformación será distinta a cualquier cosa que el género humano haya experimentado antes", vaticina Klaus Schwab, autor del libro "La cuarta revolución industrial", publicado este año.


Línea de producción en fábrica automatizada con sistemas ciberfísicos en EE.UU.Image copyrightGETTY IMAGES
Image captionLa manufactura cambiará de un modo radical y, con ella, el mundo del empleo.

Los "nuevos poderes" del cambio vendrán de la mano de la ingeniería genética y las neurotecnologías, dos áreas que parecen crípticas y lejanas para el ciudadano de a pie.
Pero las repercusiones impactarán en cómo somos y nos relacionamos hasta en los rincones más lejanos del planeta: la revolución afectará "el mercado del empleo, el futuro del trabajo, la desigualdad en el ingreso" y sus coletazos impactarán la seguridad geopolítica y los marcos éticos.

La fábrica automática y muy, muy inteligente

Entonces, ¿de qué se trata el cambio y por qué hay quienes creen que se trata de una revolución?
Lo importante, destacan los teóricos de la idea, es que no se trata de desarrollos, sino del encuentro de esos desarrollos. Y en ese sentido, representa un cambio de paradigma, en lugar de un paso más en la carrera tecnológica frenética.

5 claves para entender la REVOLUCIÓN 4.0

  • 1. Alemania fue el primer país en establecerla en la agenda de gobierno como "estrategia de alta tecnología"
  • 2. Se basa en sistemas ciberfísicos, que combinan infraestructura física con software, sensores, nanotecnología, tecnología digital de comunicaciones
  • 3. La internet de las cosas jugará un rol fundamental
  • 4. Permitirá agregar US$$14,2 billones a la economía mundial en los próximos 15 años
  • 5. Cambiará el mundo del empleo por completo y afectará a industrias en todo el planeta
Getty Images
"La cuarta revolución industrial, no se define por un conjunto de tecnologías emergentes en sí mismas, sino por la transición hacia nuevos sistemas que están construidos sobre la infraestructura de la revolución digital (anterior)", dice Schwab, que es director ejecutivo del Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) y uno de los principales entusiastas de la "revolución".
"Hay tres razones por las que las transformaciones actuales no representan una prolongación de la tercera revolución industrial, sino la llegada de una distinta: la velocidad, el alcance y el impacto en los sistemas. La velocidad de los avances actuales no tiene precedentes en la historia… Y está interfiriendo en casi todas las industrias de todos los países", apunta el WEF.
También llamada 4.0, la revolución sigue a los otros tres procesos históricostransformadores: la primera marcó el paso de la producción manual a la mecanizada, entre 1760 y 1830; la segunda, alrededor de 1850, trajo la electricidad y permitió la manufactura en masa.


Primera Revolución Industrial, ilustraciónImage copyrightHULTON ARCHIVE
Image captionLa primera revolución industrial permitió pasar a la producción mecanizada, gracias a novedades como el motor a vapor.

Para la tercera hubo que esperar a mediados del siglo XX, con la llegada de la electrónica y la tecnología de la información y las telecomunicaciones.
Ahora, el cuarto giro trae consigo una tendencia a la automatización total de la manufactura - su nombre proviene, de hecho, de un proyecto de estrategia de alta tecnología del gobierno de Alemania, sobre el que trabajan desde 2013para llevar su producción a una total independencia de la mano de obra humana.
La automatización corre por cuenta de sistemas ciberfísicos, hechos posibles por el internet de la cosas y el cloud computing o nube.
Los sistemas ciberfísicos, que combinan maquinaria física y tangible con procesos digitales, son capaces de tomar decisiones descentralizadas y de cooperar -entre ellos y con los humanos- mediante el internet de las cosas.
Lo que veremos, dicen los teóricos, es una "fábrica inteligente". Verdaderamente inteligente.


Trabajador con rollo de fibra óptica.Image copyrightGETTY IMAGES
Image caption¿Y qué pasará con el empleo?

El principio básico es que las empresas podrán crear redes inteligentes que podrán controlarse a sí mismas, a lo largo de toda la cadena de valor.
Los guarismos económicos son impactantes: según calculó la consultora Accenture en 2015, una versión a escala industrial de esta revolución podría agregar US$14,2 billones a la economía mundial en los próximos 15 años.
En el Foro de Davos, en enero de este año, hubo un anticipo de lo que los académicos más entusiastas tienen en la cabeza cuando hablan de Revolución 4.0: nanotecnologías, neurotecnologías, robots, inteligencia artificial, biotecnología, sistemas de almacenamiento de energía, drones e impresoras 3D serán sus artífices.
Pero serán también los gestores de una de las premisas más controvertidas del cambio: la cuarta revolución podría acabar con cinco millones de puestos de trabajo en los 15 países más industrializados del mundo.


Escenario del Foro de Davos.Image copyrightGETTY IMAGES
Image captionEn el Foro de Davos, en enero pasado, la cuarta revolución industrial fue la estrella del debate.

Revolución, ¿para quién?

Son precisamente los países más avanzados los que encarnarán los cambios con mayor rapidez, pero a la vez los expertos destacan que son las economías emergentes las que podrán sacarle mayor beneficio.
La cuarta revolución tiene el potencial de elevar los niveles de ingreso globales y mejorar la calidad de vida de poblaciones enteras, apunta Schwab, las mismas que se han beneficiado con la llegada del mundo digital (y la posibilidad, por caso, de hacer pagos, escuchar música o pedir un taxi desde un celular ubicuo y barato).
Sin embargo, el proceso de transformación sólo beneficiará a quienes sean capaces de innovar y adaptarse.


Gráfico de internet de las cosasImage copyrightTHINKSTOCK
Image captionUn esquema de la internet de las cosas (IoT, en inglés) sobre la que se apoya la transformación.

"El futuro del empleo estará hecho de trabajos que no existen, en industrias que usan tecnologías nuevas, en condiciones planetarias que ningún ser humano jamás ha experimentado", resume David Ritter, CEO de Greenpeace Australia/Pacífico, en una columna sobre la cuarta revolución para el diario británico The Guardian.
Aunque los empresarios parecen entusiasmados - más que intimidados- por la magnitud del reto: un sondeo revela que 70% tiene expectativas positivas sobre la cuarta revolución industrial.
Así se desprende del último Barómetro Global de Innovación, una medición que publica General Electric cada año y que recoge opiniones de más de 4.000 líderes y personas interesadas en las transformaciones de 23 países.

LA CUARTA REVOLUCIÓN

¿Qué opinan los empresarios?

70%
de los ejecutivos tiene expectativas positivas
  • 85% cree que las innovaciones de los sistemas ciberfísicos serán beneficiosas
  • 64% está dispuesto a asumir los riesgos de innovar
  • 17% teme por el impacto negativo en los trabajadores
Getty
Aunque la distribución regional es desigual y son los mercados emergentes de Asia principalmente los que están adoptando los cambios de manera más disruptiva que sus pares de economías desarrolladas.
"Ser disruptivo es el estándar de oro para ejecutivos y ciudadanos, pero sigue siendo un objetivo complicado de llevar a la práctica", reconoce el estudio.

Los peligros del cibermodelo

Así, no todos ven el futuro con optimismo: los sondeos reflejan las preocupaciones de empresarios por el "darwinismo tecnológico", donde aquellos que no se adapten no lograrán sobrevivir.
Y si ello ocurre a toda velocidad, como señalan los entusiastas de la cuarta revolución, el efecto puede ser más devastador que el que generó a su turno la tercera revolución.


Hombre y robot, ilustración.Image copyrightTHINKSTOCK
Image captionLa revolución tendrá que escribir una nueva relación entre los hombres y los robots. Pero detrás hay dilemas éticos y sociales por resolver, dicen los críticos.

"En el juego del desarrollo tecnológico, siempre hay perdedores. Y una de las formas de inequidad que más me preocupa es la de los valores. Hay un real riesgo de que la élite tecnocrática vea todos los cambios que vienen como una justificación de sus valores", le dice a BBC Mundo Elizabeth Garbee, investigadora de la Escuela para el Futuro de la Innovación en la Sociedad de la Universidad Estatal de Arizona (ASU).
"Ese tipo de ideología limita gravemente las perspectivas que se traen a la mesa a la hora de tomar decisiones (políticas), lo que a su vez exacerba la inequidad que ya vemos en el mundo hoy", agrega.
"Dado que mantener el status quo no es una opción, necesitamos un debate fundamental sobre la forma y los objetivos de esta nueva economía", apunta Ritter, que considera que debe haber un "debate democrático" en torno a los cambios tecnológicos.


Joven asiático frente a computadoras.Image copyrightGETTY IMAGES
Image captionLos mercados emergentes de Asia están a la vanguardia de la cuarta revolución, dicen los expertos.

Por una parte, hay quienes descreen que se trate de una cuarta revolución: es cierto que los cambios son muchos y muy profundos, pero el concepto fue por primera vez usado en 1940 (en un documento de una revista de Harvard titulado "La última oportunidad de Estados Unidos", que pintaba un futuro sombrío por el avance de la tecnología) y su uso representa una "pereza intelectual", dice Garbee.
Otros, más pragmáticos, alertan que la cuarta revolución no hará sino aumentar la desigualdad en el reparto del ingreso y traerá consigo toda clase de dilemas de seguridad geopolítica.
El mismo WEF reconoce que "los beneficios de la apertura están en riesgo" por medidas proteccionistas, especialmente barreras no tarifarias y normativas del comercio mundial, que se han exacerbado desde la crisis financiera de 2007: un desafío que la cuarta revolución deberá sortear si quiere entregar lo que promete.
"El entusiasmo no es injustificado, estas tecnologías representan avances asombrosos. Pero el entusiasmo no es excusa para la ingenuidad y la historia está plagada de ejemplos de cómo la tecnología pasa por encima de los marcos sociales, éticos y políticos que necesitamos para hacer buen uso de ella", remata Garbee.


Angela Merkel, en una fábrica de robots en AlemaniaImage copyrightGETTY IMAGES
Image captionAngela Merkel, en una fábrica de robots: para Alemania, la revolución 4.0 es una prioridad.


La cuarta revolución industrial está relacionada con la robótica, que jugará un papel trascendental en los próximos años, como el que tuvo la máquina de vapor durante la Revolución Industrial.

¿En qué consiste la cuarta revolución industrial? fuente

La cuarta revolución industrial está relacionada con la robótica, que jugará un papel trascendental en los próximos años, como el que tuvo la máquina de vapor durante la Revolución Industrial.

El 70% de los ejecutivos tiene expectativas positivas sobre la cuarta revolución industrial, así lo reveló el Barómetro Global de Innovación 2016 de General Electric (GE).

Según el estudio, los mercados emergentes, principalmente en Asia, son los que están adoptando una innovación más disruptiva que sus similares en las economías desarrolladas.

Empresarios y ciudadanos están de acuerdo en que las compañías más innovadoras son las que crean mercados o productos totalmente nuevos, en lugar de mejorar o reiterar los ya existentes.

Sin embargo, una parte de los empresarios teme quedarse atrás debido a que la tecnología evoluciona más rápido de lo que pueden adaptarse, y otros favorecen un enfoque incremental a la innovación que mitiga este riesgo.

La encuesta reveló que Estados Unidos sigue clasificando como el campeón en innovación; Alemania pasó del segundo al tercer lugar, y Japón sigue ocupando un sitio entre las tres primeras posiciones de los líderes en innovación, moviéndose dos lugares.

El Barómetro Global de Innovación arrojó que 90% de los directivos encuestados está de acuerdo en que  las empresas más innovadoras no solamente lanzan nuevos productos y servicios, sino que también crean nuevos mercados que no se conocían anteriormente.

“Ser disruptivo es el estándar de oro para ejecutivos y ciudadanos, pero sigue siendo un objetivo complicado para llevarlo a la práctica en las compañías”, añadió el estudio.

El otro 72% de los ejecutivos expresó que la cultura de los hackers ha emergido dentro de la creación de startups que ofrecen un nuevo modelo que afronta y desafía políticas y formas de trabajo existentes.

Un 81% de los ejecutivos dijo seguir luchando para conseguir ideas radicales, y sólo 24% siente que su empresa está funcionando de manera correcta y adaptándose rápidamente a las tecnologías emergentes, sintiendo la presión del ‘darwinismo digital’.

Nanotecnologías, inteligencia artificial, drones e impresoras 3D serán artífices de la ‘Cuarta Revolución Industrial’, según el Foro Económico Mundial de Davos. Además estimó que esta revolución podría acabar con 5 millones de puestos de trabajos en los 15 países más industrializados del mundo. -
Read more at: http://scl.io/YBLU0eou#gs.tVNhugE

Read more...

Desarrollo Organizacional: Curso

🎓 D.Organizacional 😊  Tabla de Contenidos Presentación DO (UNI VIRTUAL) Blog Desarrollo Organizacional Donde estás tú  p1 Planeacion cap 1...

Follow Us @soratemplates