La estabilidad emocional es uno de los factores de personalidad más importantes. Explica la tendencia de algunas personas a ser más vulnerables a problemas de depresión y ansiedad cuando se encuentra con situaciones estresantes.
La mayoría de las personas suelen situarse en un nivel intermedio en un continuo que va desde una alta estabilidad emocional hasta un alto grado de inestabilidad emocional.
La estabilidad emocional de una persona se ve reflejada en las experiencias vividas y el estrés al que cualquier persona puede estar sometida
Las personas con una alta estabilidad emocional tienen un mayor control de sus emociones y no se ven afectadas con facilidad por los problemas de la vida. Sus emociones son más estables, tienen un enfoque realista de la vida, son pacientes, tranquilas, perseverantes y confiables. Son personas con una buena capacidad para manejar sus emociones, resistir sus impulsos y funcionar de una manera flexible y a la vez controlada. Saben afrontar la realidad sin huir de ella.Baja estabilidad emocional (neuroticismo)
La persona con una baja estabilidad emocional tolera muy mal la frustración o el estrés. No es capaz de funcionar bien ante las dificultades, imprevistos o frustraciones de la vida reacciona con inestabilidad e intensas emociones negativas, como ansiedad, tristeza, ira, culpa, etc. Es una persona, preocupada, impulsiva, descuidada, impaciente y ansiosa se ven fácilmente turbadas y tienden a darse por vencidas con facilidad. Pueden tener miedos irracionales, sienten emociones negativas con frecuencia, guardan resentimiento hacia los demás, no olvidan con facilidad los sucesos negativos y se ven afectadas por ellos en gran medida.
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